

Si estas pensando en una picada, te recomendamos un Malbec, un vino que se adapta a una alta variedad de gustos y sabores, y va a acompañar a la perfección todos los elementos de tu plato.
Gouda, queso azul o roquefort: Son quesos fuertes y con pequeña acidez. Recomendamos vinos fuertes e intensos, como lo puede ser un Cabernet Sauvignon o un Cabernet Franc.
Brie o Mozzarela: Recomendamos vinos suaves, que no inhiban el sabor del queso, si no que busquen resaltarlo. Cómo puede ser un Pinot Noir, Torrontes, o Sauvignon Blanc.
Parmesano: Un queso con sabores picantes, recomendamos un Chardonnay o Syrah.
Les dejamos 5 vinos, que no van a fallar con el plato que desees comer:

Carne de ternera: Para los cortes magros, se pueden seleccionar vinos con taninos no muy intensos como el malbec o merlot. A mayor cantidad de grasa, se recomiendo vinos más intensos.
Carnes a la parrilla: La carne a la parrilla queda perfecto con Malbec, Cabernet y Merlot.
Cordero y chivito: Son carnes con sabores intensos y contundentes. Quedan bien con vinos fuertes, que tengan un buen paso por barrica. Puede ser un Cabernet Franc o un Sauvignon.
Carne de cerdo: Es una carne magra, y se utiliza mucho para platos con salsas o mucha preparación. Se recomiendan vinos ligeros, como el Merlos y el Pinot Noir.
Les dejamos 5 vinos, que no van a fallar con el plato que desees comer:

Salsas rojas: El más clásico acompañante de las pastas son las salsas de tomate, muchas veces combinadas con carnes rojas. La acidez del tomate invita a compartir un vino tinto, varietal o blend, de cuerpo medio y un poco de acidez.
Salsas con queso: El queso es otro de los ingredientes tradicionales que acompañan las pastas y que marida exquisitamente con el vino por sí solo. En el caso de quesos cremosos y suaves, un vino blanco de cuerpo sedoso es una excelente opción.
Salsa con frutos de mar: La mayoría de los frutos de mar se maridan con vinos blancos de cuerpo medio a liviano, y lo mismo sucede con las salsas. Sugerimos un blanco floral y fresco. Si la salsa además contiene tomates, un vino rosado es una excelente opción.
Pesto: La sencillez de esta salsa seduce hasta a los más exigentes. Recomendamos un Sauvignon Blanc, ya que combina a la perfección con la albaca, y acompaña el sabor fuerte de esta hoja.
Salsas cremosas: Con salsas estilo bechamel, lo ideal es combinar la textura cremosa con un vino fresco, que limpie y refresque la boca. Nuevamente un blanco o rosado ligero son una excelente opción.
Maridar pastas rellenas: Lo principal a tener en cuenta es el ingrediente principal del relleno, para maridar. En general, tintos de cuerpo medio se llevan bien con pastas rellenas de carne o verduras, como el malbec o un pinot.

Sushi: Un vino blanco o rosado, es una combincación perfecta.
Salmón: SI el plato que vas a cocinar contiene salmón, recomendamos un vino como el Merlot o Cabernet Sauvignon Blanc para aportarle frescura al plato y a la cena sin apagar ni tapar el sabor del salmon.
Picada de mariscos: Un vino Chardonnay es perfecto para estos estilos de platos, ya que aporta frescura, diversión y resalta cada sabor.
Ceviche: Si el pescado está en ceviche, recomendamos vinos rosados, para alivianar el picante del plato y poder comerlo sin preocupaciones.
Langostinos: Para platos con langostinos, sugerimos probar con espumantes blancos, que no sean muy dulces.